
Por: Dra. Carmen J. Rodríguez Méndez
La realidad que vive nuestro país, relacionado a la Pandemia del COVID, y el confinamiento de los niños en el hogar los hace más vulnerables al maltrato y a la violencia.
En el mes de abril del 2020, el Departamento de la Familia reportó haber recibido unos 3,069 referidos por maltrato a menores. El día 6 de abril del 2021 la agencia reportó 3,727 referidos lo que implica un aumento en un 21.4%. Estos son los casos reportados, existen otros que lamentablemente permanecen en el anonimato y los niños continúan siendo victimizados.
Conforme a la Ley 246 del 2011 se define el maltrato como todo acto u omisión intencional en el que incurre el padre, la madre o persona responsable del menor de tal naturaleza que ocasione o ponga a este en riesgo de sufrir daño o perjuicio a su salud e integridad física, mental y/o emocional incluyendo abuso sexual o la trata humana según es definido en esta ley. También, se considera maltrato incurrir en conducta obscena y/o la utilización de un menor para esos fines.
Conforme a lo antes expuesto el maltrato puede ejercerse por acción o por omisión. Existe cuatro parámetros en los que el maltrato hacia niño puede ocurrir; físico emocional, negligencia y abuso sexual. En Puerto Rico el maltrato hacia niños puede tener resultado nefastos como puede ser la remoción de los menores y el confinamiento del padre o custodio agresor.
Las familias que identifican su incapacidad para enfrentar los estresores sociales asociados a esta Pandemia, tales como: la pérdida de recursos económicos, el confinamiento involuntario, asumir los rol de maestro y empleado virtual; deben pedir ayuda a tiempo. El no hacerlo propiciará que la situación pueda escalar y traer situaciones sumamente perjudiciales para el niño como pueden ser la agresión física y verbal.
Existe la Línea PAZ, o especialistas en conducta humana que atienden sus pacientes de manera virtual, consulten a su plan médico. Ellos pueden ser unos excelentes recursos para ayudar a los padres y custodios a desarrollar las destrezas necesarias para enfrentar todos estos retos que se han suscitado como consecuencia de esta Pandemia del COVID.
Durante este mes se está celebrando una campaña “YO DEFIENDO EL FUTURO”, por el Departamento de la Familia. Su propósito es reafirmar que nuestros niños son el futuro y hay que mantenerlos seguros. El Departamento de la Familia también tiene una línea confidencial, 787 749-1333, para denunciar posibles casos de maltrato. Si identifica que un niño está siendo víctima de maltrato o violencia; refiéralo antes de que la situación se convierta en un daño permanente en el niño.